Un tiempo de cambios en España y en el mundo.
En 1868 fue derrocada Isabel II por una coalición de fuerzas políticas, que terminaron peleándose entre sí. Ni cuajó una nueva monarquía parlamentaria (con otra dinastía), ni una primera república, mientras en Cuba se libraron los primeros combates por la independencia y los carlistas volvieron a la carga con brío. Fue el Sexenio Revolucionario, del que hoy en día no se tiene una imagen tan caótica como hace unos años.
Los nuevos gobiernos, de formaciones políticas distintas, se inclinaron por la más clara separación de la Iglesia del Estado, después de la preferencia de Isabel II por figuras del mundo eclesiástico, con cierto peso en sus decisiones. También se defendió la libertad de cultos. Aunque no se alentó el anticlericalismo, sí se auspició el laicismo.
El papel de la Iglesia católica se discutió no solo en España, sino en otros países, como en los recién creados Estados italiano y alemán. Los cambios sociales eran notables en un mundo a punto de entrar en la segunda fase de la industrialización y en la carrera imperialista.
La Vera Cruz de Requena capeó el temporal, una vez más, pero durante aquellos años se hizo evidente su agotamiento.
El termómetro de la trayectoria económica.
La crisis económica (alrededor del negocio ferroviario y las subsistencias) perjudicó a muchas personas y no dejó de repercutir en los ingresos de la Cofradía, que intentó cubrir sus gastos:
Ejercicio anual | Ingresos | Gastos |
1867 | 2.176 | 3.756 |
1868 | 1.122 | 1.295 |
1869 | 1.075 | 1.113 |
1870 | 1.574 | 1.295 |
1871 | 1.865 | 1.390 |
1872 | 1.594 | 475 |
1873 | 2.556 | 1.748 |
En el fatídico 1867 los gastos se destinaron a los oficios y en lo sucesivo se tuvieron que ajustar de una forma más estricta. La remontada de 1873 resultaría de ciertos ahorros hechos con no escasa apretura.
Los problemas de gestión.
En 1870 se reconoció una equivocación, involuntaria. en las cuentas. Al no encontrarse el documento acreditativo, la mitad de los 225 reales debidos corrieron a cargo del mayordomo y de la Hermandad, a partes iguales.
La sombra del clero es alargada.
En la Vera Cruz ganaron protagonismo los presbíteros Ceferino Diana, Juan Antonio Navarro y Juan Suárez. En la junta del 24 de marzo de 1872, el cabildo deseó concurrir a los empleos con la intención de no dejar vacantes. Por dos seglares debería haber un capitular y el pendón sería llevado dos años por seglares y un año por un capitular.
En aquel mismo año, Juan Antonio Navarro no dejó de cobrar sus derechos de Cuaresma y Valentina García Pérez costeó el palio para la Virgen de los Dolores, cediendo el usufructo a la Cofradía. Aquélla, con todo, se reservó las dos primeras de las ocho varas a correr y la custodia en su casa, no saliendo de la misma en caso de lluvia.
¿Falta de popularidad?
Con todo el esfuerzo, la limosna del pueblo se intentó mantener, no sin dificultades:
Año | Cantidad |
1867 | 929 |
1868 | 1.122 |
1869 | 514 |
1870 | 1.023 |
1871 | 1.214 |
1872 | – |
1873 | 545 |
Si en 1869 se lograron 302 reales de la limosna de los hermanos y del platillo, al año siguiente la de los hermanos reportó solamente 254.
A 16 de febrero de 1873 Juan Antonio Navarro observó que de año en año bajaban los penitentes. Era un signo de ello la creciente importancia del clero, que a su vez alejaba a más de uno en un tiempo revolucionario.
La teatralidad como antídoto.
Para evitar el declive y alejar la sombra del divorcio con parte de la sociedad local, se hizo uso de un recurso muy propio de las cofradías fundadas en los tiempos del Barroco, resaltar el fasto de los oficios religiosos, de su teatralidad, una forma estética para animar la fe.
En una sociedad formalista como la española del XIX, podía tener éxito y en 1873 la Veracruz adquirió en Valencia por 266 reales trajes para el Apostolado, las Tres Marías, los dos Ángeles y el Ángel Custodio. Otros 366 reales costaron las cortinas del Monumento. En los siguientes años se demostraría el alcance de tal proceder, con sus virtudes y sus limitaciones.

Fuentes.
FONDO HISTÓRICO DE LA VERA CRUZ DE REQUENA.
Libro Nuevo de la Vera Cruz.